martes, 6 de diciembre de 2022

VAMOS A CONTAR HISTORIAS. VIEJAS GLORIAS Cap.2


Seguimos anclados en aquel tedioso y lento andar del tiempo por las veredas y caminos, los isleños usaban como animal de transporte las bestias, que llevaban las cargas en albardas, serones y anganillas. Y así transcurrieron más de 300 años hasta que llegaron los primeros carruajes. Pero el transcurrir de los tiempos pernoctaron animales, carros y vehículos hasta bien entrado el siglo Veinte.  Desde la primera transición de la bestia al vehículo. Desde 1850 a 1970, largos 120 años, que compartieron carreteras y caminos, el futuro era inminente y los tiempos iban a mejorar notablemente para todos.

EL BIRLOCHO / Foto Surdoc

Pero vayamos más lentos, vayamos al ritmo del censo de la época, así el primer control provincial se llevaba a cabo con el siguiente registro en 1850

Caballos en la isla de Gran Canaria. 1.200, Camellos. 30 mulos 100, Asnos 3200 Y Bueyes y vacas 8.000 Uds. La necesidad de hacer un censo de animales de transporte y ayuda doméstica era el primer factor del progreso para los siguientes años venideros.

Otra de las curiosidades más entendibles, que actualmente se organiza en las fiestas de las tradiciones, son las competiciones de arrastre de carga con bueyes, este deporte llegó a ser la primera competición de las islas en las fiestas patronales, como espectáculo de masas, las mejores yuntas de reses, aun hoy se conservan

 


en algunos lugares, cerca de las iglesias antiguas, Grandes bloques de piedra, que se usaban para dichas competiciones en arrastre de corsa.

La necesidad de abrir las comunicaciones entre pueblos de las islas, arrancó con la fundación de las primeras empresas de transportes de carruajes, tirados por bestias. Arrancó en canarias; en 1854 en Tenerife y en 1860 en Gran Canaria, ya comentamos las ventajas de la capitalidad de una sola provincia. Y como las prohibiciones llegaban antes que las actuaciones, cabe destacar que ya en 1772 se emitió un bando donde se prohibía, arrastrar maderos o corsas, por las vías donde pudieran andar carruajes a rueda, esto sucedía muchos años después.

La primera empresa en fundar el transporte de Carruajes en Tenerife para viajeros entre pueblos, la creó los hermanos Hardinson. El 4 de enero de 1854, estableciendo el recorrido entre Santa Cruz y la Laguna, invirtiendo un capital social de 50 acciones de mil reales de vellón

En Gran Canaria, tras la apertura de la primera carretera insular entre Las Palmas y telde, se funda la empresa de transportes de carruajes La Primera. En 1860. Por D. Nicolás Massieu, Pero no fue hasta el 4 de febrero de 1863 cuando se abre el túnel de la Mar fea -La Laja- comenzando a operar regularmente con Telde, Con el sur, Tafira y Monte Lentiscal.             

CENSO DE CARRETELAS DE TIRO, ONNIBUS, BIRLOCHO

Cabe la anécdota de que la venta de billetes de viaje era superior al número de asientos del carruaje, y por dos veces consecutivas el viajero Antonio Calimano, se tuvo que quedar apeado, con un cabreo monumental, alquiló un Charabán -carro de un solo caballo- a un transportista de Telde, se presentó en la capital y denunció ante el Ayuntamiento, el abuso cometido, tuvieron que devolverle el importe del billete, no sin antes un juicio de acusaciones. De aquel primer expediente de los primeros viajes queda el billete que se expidió y que presentó como denuncia.

  Compañía de transportes La Primera Billete de Viaje Las Palmas – Telde.  Año 1865

Pronto le seguiría, la competencia, una segunda empresa del Transporte en Gran Canaria en 1864 fundada por D. Hipólito Lustré y familia. Emprendedores de Teatro y Gimnastica que habían obtenido gran popularidad en la capital.

En la capital eran famosos los viajes de ocio, de Las Palmas al Puerto de luz, a tomar un caldo de pescado y volver en la caída de la tarde. Los que no tenían coche alquilaban entre cuatro cinco uno y disfrutaban del tiempo y la jornada.

En los periódicos locales de 1865 se ofertaban además viajes a tomar una escudilla de leche recién ordeñada fuera del área de Triana, un cochero esperaba todas las mañanas en el camino nuevo, solo había que madrugar, para poder disfrutar del aperitivo, *desde el amanecer hasta las ocho- y el viaje los llevaba a la hacienda Molinos de Viento en el barrio de arenales. El vaso de leche y el viaje de ida y vuelta costará un real de vellón y 24 céntimos. Rezaba el anuncio.

Y con los primeros reglamentos emitidos, los primeros impuestos generados, llegaron también las desgracias. El primer accidente de carruaje con muerte se produjo en 1861 en el camino viejo de Tafira, el carro volcó quedando atrapado D. Fortunato de la Cueva, comandante del castillo de San Francisco del Rey. El segundo y de gran conmoción generalizada se produjo en la carretera del puerto a Las Palmas, del impresor del periódico La correspondencia y el Ómnibus. D. Isidro Miranda, sucedió cuando se soltó la chaveta que agarra las ruedas del carruaje, cayendo al suelo y saliendo despedido. Hubo que amputarle la pierna machacada.

El periódico anunciaba con exagerado presagio.

“No es necesario, ni materialmente posible, el mencionar tan sólo los nombres de las víctimas que la rueda ha causado en la Isla. Su número va siendo tan crecido, por desgracia, que pronto la epidemia de cólera -la mayor calamidad padecida en Gran Canaria- quedará en este aspecto en segundo lugar”.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Entrada destacada

PASAJES AL MACHU PICCHU

Amaneció en el Valle Sagrado. Los Incas, establecieron aquí su imperio fundaron sus credenciales y adoraciones en toda su cultura se ad...

SIEMPRE ES MOMENTO PARA EL RECUERDO