MARIPOSAS DE INVIERNO

Revolotea en la mirada el haz de color pixelado, 

como acuarelas de invierno en los campos verdes imantado.

Sus nociones son alegria, satisfacción de renovar el aire limpio y frío.

comienza otro ciclo con la puntualidad del sol

algodones blancos de polén anunciado

Cuantas tiernas visiones nos escandilan el alma

Todas las sensaciones de tu esplendor mueven los hilos y la calma

Almendreros florecidos de esperanza, recepción del color inspirado

cuantas melodías y sueños eres capaz de pronunciar tan solo con galantería

en unas laderas olvidadas sin recepción ni encanto

Pintas de entrañable color entre el marrón y el cobalto. 

majestuosidad encantada en puzle de hojas vivas

Llueve al arrecio del viento, nieve de algodones y susurros celestiales

alfombras manteladas, que durante unos días dejan encandiladas tus púpilas

Cuando alegría contenída, cuanto paisaje regalado

 tus simpatías decididas, un regalo bien amado

Gracias tierra, por dar fé y color a las mariposas del invierno, 

que puntualmente nos recuerda la nostalgia de un bien guardado, un paisaje olvidado, un sueño cumplido. Tus pétalos almidonados como gotas de agua desaparecen en la tierra

primero dando vida, luego alegría y luego cimiente

sobre el verde lienzo te espero, para mitificar tu naciente

 despuntar pinceladas con perezas al amanecer, cuanta belleza y amor
exhibición de sosiego y ternura del creador

Todo es un ofrenda primaveral, como resistir ante la inmensa fortuna 

de ser visionario de tus logros y redundar en la vida desde la cuna

Gracias tierra sagrada,
plenitud y exaltación de vida, en cada secuencia
 universo de belleza y expectáculo de ciencia

Volver a la estación de los sueños, esperar que la luz dibuje el color del invierno
Mariposas con petalos de almendrero,
que esplendor y exhuberancia
regalar a la mirada abundancia, entre enero y febrero